Guardo un pequeño secreto, del tamaño de un ratón...Aunque a veces crece, a veces es tremendo y aplasta mi corazón.
Maúlla y es oscuro, sigiloso se escabulle en las noches por mi habitación.
Es algo que él no sabe, es algo que quizá intuye, bueno creo que ya lo dije... Sueño con él no sólo en las noches, tengo una especie de amor platónico enfermizo, o más bien, ¿algún tipo de duelo patológico desfigurado?
A pesar de quedar dañada, de que mi mundo interior quedó revuelto como tras el paso de un huracán aún queda algo de pie, algo que permanece, inmutable y perpetuo.
Un corazón vivo, eso sí, muy lastimado, pero aún moribundo late. Y late pensando sólo en él, ese que abarca en mis sueños todo, y mi pensamiento.
¿Cómo puede uno olvidarse del dolor tan rápido? En momentos como estos es que entiendo que el ser humano no sólo vive de la carne...
Se me da la gana ennumerar las cosas que me hacen pensar en él, en mi estatua que he fundado del "amor" al que le puse cara de "N"...
Los gatos, la noche, la luna, las estrellas fugaces, el color rojo, los juegos, las sonrisas, placebo, him, metric... , jack, Stripped.
Son tan solo recuerdos de adolescente, y quizá sea absurdo mantener acorazado un simple músculo que a punta de maltratos se fortalece... porque eso es el corazón, sólo un músculo, se ejercita y ya... pero a este punto sigo manteniéndolo resguardado, oculto en las barreras de un amor idealizado, tan ideal que nunca aterrizará.
No, no es enamorarme del amor, es enamorarme de la vida, de mi vida. Sigo obstinada e insistente, soberbia... me codeo a la altura del Dios, le digo que yo fui partícipe de ver cómo es que edificó al universo, le digo "hey me grada tu trabajo ese, el del big bang, la creación del todo...muy chido eh hombre".
Para mi queda grabado, que amar es descender a los infiernos y elevarse hasta el cielo. Así y sólo así puedo amar.
Amar a mi Fausto, mi Quijote, Iván, Cathy.
