Yo era sólo una niña, y ya me estaban explicando lo que era el amor. Ir a la iglesia, rezar el rosario, alabar a Dios, vestirte con faldas largas, ir al catecismo, nunca usar escote, no subirte al coche de nadie, estudiar una carrera y casarte con un chico bien. Llegar virgen al matrimonio. Querer bien. Que te quieran bien. Ser ama de casa y cuidar a los chamacos.
¿Qué idea tan estúpida nos han metido nuestros padres de esta generación?
No. Yo elijo que el amor no sea así.
No se de cierto lo que sea el amor. Porque no lo conozco, pero esta ideología regia que nos ha inculcado esta sociedad nos mantiene torpes.
Y esto arrasa, nos trastorna, querer encontrar, dentro de nuestro mood, al momento de encontrar a alguien, sin querer, de repente, idealizamos.
Y ya, lo (la) trepamos a un altar, porque es la conjugación de lo que me enseñaron con lo que yo pienso que debe ser el amor.
Dejémonos de tonterías, una pareja tiene vida antes y después de ser pareja. Nunca debemos perder la identidad.
Cuando perdemos la identidad, se pierde por completo el sentido de amar.
Yo te quiero bien. Bien por lo que eres y por lo que podemos ser juntos. No por un estúpido cliché.
Querer bien...eso es todo un tópico aparte... Ya llegará el momento propicio para escribir/vomitar algo respecto a ello, espera mi réplica.
ResponderEliminarSaludos.
H.
Elizabeth Dvalley dice (al telefono): Por eso no me gustaba la sirenita y me gustaba mas Hanz Christian Anderson, por eso no me gustaba la cenicienta pero si los hermanos Grimm, porque el yugo de la cultura sobre la mujer, es demasiado, y los costos son muy caros.
Ps. Quema de brassieres!!!
¡jajajajajajaja! ¡quememos los brassieres hoy mismo!
ResponderEliminarError de la letra muda! es Hans Christian AnderSEN
ResponderEliminarpues sii hacen falta protestas femeninas más alla de derechos politicos, pero es harina de otro costal